Me gusta ver los crímenes castigados, sobre todo siendo tan poco frecuente como resulta hoy día.
Casualmente ha sido un tema de debate esta mañana, y con la gracia que me ha hecho esto de la moto que cuento, ha continuado por la tarde.
Iba caminando por la calle junto a la plaza Indautxu, y veo un macarra en una moto (un grillo) tan tranquilo cruzando el paso de peatones y siguiendo por la acera, se me ha escapado un "dónde vas!" bajito, mientras pensaba cuanto se merecería ese maleante que pasase por allí la ertzaintza.
Total que he seguido con mis recados (sin éxito todo he de decir), y casualmente he vuelto a pasar por la calle donde había visto al de la moto, y he visto a una pareja de municipales que habían parado al macarra, pidiéndole los papeles preparados para multarle y teniendo que ponerle freno a un colega suyo que le estaba justificando.
¡Lo que me he podido reir!
crimen y castigo
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 commentarios:
e joda! bien merecido q lo tiene
Publicar un comentario